El Ayuntamiento de Madrid endurecerá las restricciones al tráfico en la capital en episodios de alta contaminación —cuando la concentración de dióxido de nitrógeno active los niveles 3 o 4 del protocolo vigente— prohibiendo circular a los vehículos que no tengan distintivo ambiental. Hasta ahora esas restricciones se aplican sobre el número de la matrícula (par o impar) y solo en el interior de la M-30. La puesta en marcha de esta medida está prevista para después del verano, y supondrá una reducción del 17,7% de la circulación en la ciudad y del 33,2% de las emisiones del tráfico, según el Consistorio.